Konya

A unos 250 kilómetros al sur de Ankara se encuentra la ciudad de Konya, una de las más conservadoras de Turquía.

Esta ciudad, de origen hitita que se remonta a hace más de 4000 años, es la cuna de las órdenes de derviches giróvagos y un popular sitio de peregrinación para musulmanes de todo el país.

En el siglo XIII, cuando la ciudad era la capital del sultanato selyúcida de Rum, acogió una importante masa de inmigrantes que huían de la invasión mongola. Entre estos recién llegados estaba la familia de Celaleddin Rumi, de origen afgano, uno de los filósofos místicos más importantes de todo el mundo.

La atracción principal de la ciudad es el Museo Mevlâna, que alberga también la tumba del filósofo. La cúpula de azulejos turquesas es una preciosidad. El interior contiene la tumba de importantes derviches, la del propio Mevlâna, e incluso reliquias como pelos de la barba de Mahoma.

Más conocido como Mevlâna, creía que "la música y la danza representaban un medio para inducir un estado estático de amor universal y ofrecían una manera de liberar al individuo de la ansiedad y el dolor de la vida diaria." ('Turquía. Guías visuales de El País Aguilar.') Así, tras su muerte se fundó la Orden Mevlevi, más conocida como los derviches danzantes, que se expandió y durante el imperio otomano llegó a ser una importante influencia desde los Balcanes hasta Egipto.

A la entrada del Museo Mevlâna se encuentra la Mezquita Selimiye, del siglo XVI.

La parte principal de sus rituales es el Sema, una danza simbólica que representa el viaje espiritual del hombre que a través de la razón y el amor alcanza la perfección con Dios.

Poco a poco los derviches pasan de un estado al otro. Cuando giran simbolizan la ascensión hacia el amor divino. Después vuelven al estado de sumisión, hacen una reverencia y detienen la danza en seco.

El maestro derviche supervisa que los participantes estén desarrollando la danza adecuadamente.

[ Coordenadas para Google Earth: 37º52'14''N 32º30'17''E ]